Las válvulas de tipo Howell-Bunger son válvulas diseñadas originalmente para disipar energía y regular caudales.
Sustituyen a las tradicionales de chorro hueco y son válvulas de diseño simple y muy eficaz en su función. El concepto de diseño es dispersar el chorro de salida de manera que se produzcan los menores daños posibles sobre la zona de impacto.
Por su diseño característico son capaces de regular con precisión en todo su rango de apertura, si bien, en pequeñas aperturas, debe cuidarse el riesgo de cavitaciones.
Modernamente se ha “pervertido” el diseño de la válvula añadiéndole un concentrador de chorro, que evita la dispersión y pulverización del agua, que ha producido históricamente problemas de carga de agua en ladras y, en el caso de existir, de suciedad y problemas de mantenimiento en subestaciones.
Las partes que componen una válvula Howell-Bunger son:
- Cuerpo fijo
- Cuerpo móvil
- Accionamiento
- Concentrador
Cuerpo fijo
El cuerpo fijo de una válvula Howell-Bunger consiste en un cilindro embridado que se une al final del conducto terminado en un cono cuyo vértice y generatriz siguen la línea del flujo. Constructivamente el cilindro se une a un eje central mediante aspas planas longitudinales.
La base del cono lleva colocada la banda de cierre de EPDM fijada mediante una brida metálica.
El cilindro se fabrica en acero inoxidable siendo su superficie mecanizada para permitir el deslizamiento y cierre del cuerpo móvil.
Cuerpo móvil
El cuerpo móvil es un cilindro metálico que desliza sobre el cuerpo fijo. Su parte de aguas abajo es la que realiza el cierre de la válvula sobre el perfil de EPDM del cuerpo fijo, con cierre metal-goma.
En la parte de aguas arriba se sitúan el perfil de cierre con la camisa del cuerpo fijo y el rascador para limpieza de la camisa.
El cuerpo móvil lleva bandas de bronce por su interior para deslizamiento sobre el cuerpo fijo.
Accionamiento
Para su funcionamiento la válvula Howell-Bunger debe desplazar el cuerpo móvil en línea con la tubería. Para ello se utilizan actuadores lineales, habitualmente cilindros oleohidráulicos o husillos roscados. La configuración estándar es de dos actuadores por válvula dispuestos en horizontal a 180o.
Estos actuadores se fijan por un lado al cuerpo fijo y por otro al cuerpo móvil, siempre por la zona exterior al flujo.
En el caso de actuadores oleohidráulicos, las presiones de trabajo se deben mantener por debajo de los 120 kg/cm2.
Concentrador
En el caso que no se desee un chorro cónico por su gran dispersión, se puede utilizar un concentrador de chorro para producir un chorro cilíndrico.
Consiste en una pieza troncocónica unida a otra cilíndrica que se amarra mediante una brida a la parte de aguas abajo del cuerpo móvil.
El concentrador se diseña con partidores de lámina que a su vez airean el chorro que queda con forma de cilindro hueco por el interior.
Los materiales utilizados en la fabricación de las válvulas Howell-Bunger son los que a continuación se detallan.
Cuerpo fijo | S 275 JR |
Camisa | AISI 304 |
Cierre | EPDM |
Cuerpo móvil | S 275 JR |
Bandas deslizamiento | BRONCE RG-5 |
Cierre aguas abajo | S275JR |
Cierre aguas arriba | EPDM y rascador |
Unión a tubería | EMBRIDADA |
Concentrador | S275JR |
Cilindro | DOBLE EFECTO |
Camisa del cilindro | ST 52 |
Vástago del cilindro | INOXIDABLE cromado |